ALCALDÍA, VACACIONES Y EXIGENCIAS DE EMPLEOS PARA LAS BASES DEL PRM.
Por: William Santiago.
La Alcaldia de Barahona llevó a cabo un contrato oneroso de más de casi 3 millones de pesos con una empresa de aseo privada para la recogida de basura, una vez hecho dicho contrato, se procedió inmediatamente dar a conocer 7 supuestos camiones, los cuales fueron presentados como nuevos, y tal parece la realidad es otra, pues son camiones muy usados y al parecer todos con desperfectos mecánicos, muchos de ellos se dice que han sido observado "quedado en nuestras calles."
No obstante a la obligatoriedad que tiene dicha empresa para la recogida de basura en nuestra ciudad, también se pueden observar otros camiones de la que se desconoce su propietario, estos últimos camiones no son propios para tales tareas, pues los empleados se observan hacer grandes esfuerzos para subir grandes sacos y fundas de basura a los mismos, son camiones no apto para tales funciones.
Estas volquetas, las cuales al parecer no son pertenecientes a la empresa privada contratada para tales funciones, y mucho menos al Ayuntamiento, podrían estar laborando a cuenta de otros gastos más que deberían ser aclarado, si fuese así, es claro que las cosas no son como nos la habían pintado.
Tenemos un contrato con una empresa recolectora de basura, y en cambio también en las calles se observan camiones que no pertenecen ni al Ayuntamiento ni a la empresa contratada, cabe pues preguntar:
¿A quién pertenecen dichas Volquetas?
Pese a ellos, hoy nuestra ciudad sigue inmersa en grandes toneladas de basura, los camiones contratados no dan abasto, nuestra ciudad sigue de mal en peor... en cambio nuestro alcalde sigue con sus andanzas de más de 2 semanas por los predios de USA, ojalá sea en labores propias del Ayuntamientoy no en plena labores vacacionales.
Esperemos que después del 16 de este mes, día en que está pautada su llegada a Barahona, nuestro Alcalde se reintegre a sus labores y pueda también dar respuesta a muchos hombres y mujeres de las bases del PRM que siguen sin empleo llevándoselo el mismísimo diablo.